viernes, 28 de noviembre de 2008

Eres feliz?

Eres feliz? Pregunta difícil, mas para los hombres de hoy, que se preocupan por lo que sucede en el Líbano, por el tipo de cambio, por el calentamiento global, es la era de la información y es cuando mas desinformados solemos estar, lo peor de todo que esta ignorancia suele hacer a los hombres infelices, que bella es esa ignorancia que nos crea felicidad.


Siempre conteste que si, que soy feliz, y hoy, por alguna razón, (si, culpa tuya) recordé esa pregunta, y era imposible negarte que lo era, que lo soy, mas cuando esos ojos se abren brillantes, que la sonrisa de tu rostro me pregunta, “eres feliz?” no lo puedo negar, soy feliz, aunque me gustaría dejar a un lado mis preocupaciones, lo soy, y trato de que la gente a mi alrededor abra los ojos, y sonría, cuando recuerdo hacer esa misma pregunta, pregunta que suele sonsacar los pensamientos de los demás, pregunta que extrañamente siempre puedo responder afirmativamente.

Corazon de poeta

Tiene la expresión de una flor, la voz de un pájaro
y el alma como luna llena del mes de abril
 
Tiene en sus palabras calor y frío de invierno
su piel es dura como el árbol que azota el viento
 
Y tiene el corazón de poeta, de niño y grande, de hombre y niño
capaz de amar con delirio, capaz de hundirse en la tristeza
 
Pues tiene el corazón de poeta, de vagabundo y de mendigo
y así lo he conocido, así me gusta a mí que sea
que tenga el corazón de poeta
 
 
Tiene la arrogancia del sol, mirada cándida
su piel de nieve se hace fuego cerca de mí
es amigo y amante fiel de las estrellas
camina junto a mí soñando con cosas bellas
 
Y tiene el corazón de poeta, de niño y grande, de hombre y niño
capaz de amar con delirio, capaz de hundirse en la tristeza
Pues tiene el corazón de poeta, de vagabundo y de mendigo
y así lo he conocido, así me gusta a mí que sea
que tenga el corazón de poeta
 
 
Pues tiene el corazón de poeta, de vagabundo y de mendigo
y así lo he conocido, así me gusta a mí que sea
que tenga el corazón de poeta
 
Que tenga el corazón de poeta



Jeanette

jueves, 27 de noviembre de 2008

Encrucijada

No se como tomarlo, como enfrentarlo, pero seguramente saldré perdiendo tanto si huyo como si me planto, si huyo y obedezco, no me quedaría de otra que dejar que me sometan las inseguridades tuyas, si me planto y hablo, seguramente (es una suposición que creo no estará fuera de la realidad) solo probablemente, te sientas mal, quieras una explicación detallada de los detalles que no hay, buscaras porqués y peros que seguramente no podré responder, así que…


Si me niego a dejar atrás a algún conocido y a hacerte sentir mal, cual es la solución?

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Cirugía al alma

Hagamos una operación, si metamos nuestras almas al quirófano, una cirugía de alto riesgo, de esas que pueden matarnos, es una operación delicada no lo dudemos, habrá muchos cortes, tal vez corramos el peligro de desangrar a nuestra preciosa alma, pero es necesario hacerle una cirugía de alto riesgo.


Bisturí en mano, el manual para el cirujano novato, sin anestesia, si, tenemos que destriparnos sin anestesia, solo así se curaran las heridas, vamos a ver nuestra alma, ahí, tumbada frente a nosotros, las manos nos temblaran, dudaremos en donde hacer el primer y muy doloroso corte, aquí me salio a mi lo masoquista, arranque el egoísmo, me dolió demasiado, pero seguí, quise buscar mas, encontré una baja autoestima y también los arranque, vaya que eso arranco un gran grito de dolor de mi y mi pequeña y dolorida alma, pero no me importo, quería desangrarla, así que busque un poco mas, metí mis manos hasta dentro, mis antebrazos desaparecían en aquel mar de sangre y lagrimas, pero no me detuve por el dolor de mi dolida alma, busque, hasta encontrar mis miedos, no lo dude, los tome, no me importaba las lagrimas, los lamentos, ambos llorábamos, pero aquellos miedos salieron de aquella gorda y pesada alma, tarde mucho en sacarlos a todos, había de muchos tamaños, pero conseguí quitarlos a todos, algunos dolían mas y hacían gritar a mi alma, otros parecían salir solo con un suspiro, mire a mi lado, había un gran montón de basura ensangrentada, pero aun faltaba algo, tal vez lo mas importante, faltaba reanimar aquel pequeño órgano que parecía muerto, no recuerdo bien que parte era, pero el corazón ya latía con mas fuerza, vivo y feliz, pero había una partecita, esa pequeñita cosa que parecía muerta, la acaricie un poco, recuerdo que hasta la bese, eso parecía calmar un poco a mi alma, pero después de algún suspiro ese supuesto órgano se movía, parecía cobrar vida, sonreí y suture las varias y mas que dolorosas heridas, pero estaba feliz, había un hecho un buen trabajo y sin ayuda del manual para el cirujano novato, cuando termine y abrase a mi alma, esta desapareció, volvió a donde pertenece, pero ese nuevo órgano se sentía perfecto, lleno de confianza… confianza a mi mismo.

Homenaje




Dime, para que sirve un libro? Anda piensa un poco (se que el resultado de ese pensar será “para leer” eso si corremos con suerte, si no seria un “para nada”) ponte algo filosófico, divaga, retrocede, es una pregunta curiosa, esa de para que sirven, alguna idea?


Yo tengo una, antes de la imprenta, cuando monjes eruditos, aburridos y célibes se encerraban en monasterios a transcribir una y otra vez un libro (en su mayoría religiosos) ahí, en esos pequeños lugares, se hacia historia (y también hermosos libros ilustrados) se crearon las bases escritas de la religión mas grande del mundo, se crearon los manuales de una vida recta, después, cuando a algún alemán loco se le ocurrió algo llamado imprenta (mi invento favorito) hubo una pequeña explosión de información, (que hasta ahora el Internet a igualado en unos pocos 15 años mas aun así nunca lograra la misma esencia) con esta explosión de información se crearon fuertes cimientos, estos pilares, son de algo muy esencial, las bases de la sociedad civilizada, y solo por pequeñas grafías, papel y tinta, estos libros, fueron los manuales de vida, los manuales de pensamiento, los desarrolladores de tecnología, aunque se que su futuro ya no suena tan bonito, se que al final serán suplidos por un monitor, que ya nadie tendrá un montón de trozos de papel en el bolsillo, que ya pocos viajaran al pasado en aquellas novelas históricas, se van acabando los libros, se va acabando la cultura, ahora un ingeniero solo conoce números y sistemas, antes, conocían al menos que Mickey Mouse no era un héroe de la nación, es triste le futuro para estos pequeños (donde conocimos otros países, ecosistemas e incluso personas) se que mis nietos no tendrán uno de esos, donde perder sus tardes, así me levanto, para darles un pequeño y sencillo homenaje a esos trozos de papel que me permitieron saber del pasado, que me permiten conocer el presente y tratar de vislumbrar un futuro, a esos, mis libros.

lunes, 24 de noviembre de 2008

Sarcasmo y cafeina

Divago, si es hora de divagar, entre el sarcasmo y la cafeína, no es que necesite mucho esta ultima, la simple preocupación no me deja dormir, y la cafeína tiene el efecto contrario en mi cuerpo que el que suele tener en los demás, pareciera que mi sistema la tiene como amiga y mi glucosa se va de parranda con la cafeína para dejarme dormir, pero ni así puedo dormir tranquilo, pareciera que me hice asiduo no mejor dicho adicto a los susurros nocturnos, a las visitas diarias, a las caricias antes de dormir, pareciera imposible dormir tranquilo si no tengo una sola palabra tuya, si tu aliento no rozara mi cara, me hablara de cuentos utópicos o amores eternos.


Me gustaría seguir tu olor, hacer maletas y volar por los cielos tras tu rastro, no se donde buscarte, pero seguro te encuentro mas rápido desde el cielo, tal vez estés escondida tras la esquina de la casa, tal vez cerca del puesto de guardia, incluso debajo de mi cama, no se que tan rápido corran tus pies, puede que te escabullas asta Panamá, que saltes el canal y llegues a la Pampa Argentina, no se, tal vez llegues a Brasil, aunque creo que te buscare en Uruguay, ahí, si, estoy seguro que ahí te encontrare y así me enseñaras a bailar tango, seguro que se ve bien Uruguay desde el cielo, desde ahí te buscare, tras los pubs, en los billares, incluso en algún hospital (no vaya a ser que estés muriendo) tal ves en el campo (pero, o sorpresa! sigues escondida bajo mi cama), te buscare en las academias de baile, si corro con suerte y te encuentro ahí, no te puedes negar a enseñarme el tango (no puedo evitar imaginarte con un vestido y tacones altos), tal vez me precipite y estés mas lejos, cruzando el Atlántico o quizás el Pacifico, no se donde te encuentres, pero seguro te encontrare desde lo alto, se donde te puedo encontrar, en mi mente y en mis sueños, se que todos los días terminas cansada (como no lo vas a estar si te la pasas dando vueltas todo el día en mi mente?) también se que si te busco bajo mi cama, escondida entre el polvo y la paja, dejaras de estar solo en mi mente mal criada.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Lujuria

- Como estas?

- Paresco militar…

- Como es eso?

- Firme, firme


O.o

temo perderte

Hoy temo perderte,

no que salgas por la puerta y te marches con otro,

aunque puede ser una pequeña duda,

temo que duermas,

que cierres tus pequeños y hermosos ojos

y no los abras de nuevo,

que caigas en ese peligroso coma que tanto anuncian,

temo que te levantes de la cama y te golpes en la cabeza

ahí termine tu existencia,

temo que salgas de la casa

que la visión te haga una mala pasada,

que cuando mires a la puerta

estés perdida en la nada.


Pero más que nada amor

Temo a ese silencio que se levanta,

El celular falla, cuando antes hablabas,

Ahora el pc no anuncia nada.


Temo a este silencio que se levanta,

Cuando antes te pedía que callaras,

Temo cuando no te veo en la mañana,

Cuando me levanto de la cama.

Manual del suicida novato.

Veamos, si están leyendo esto, seguro ya tienen la gran decisión tomada en las manos o llevan un gran morbo de ver como se suicidaría alguien, pero vamos, eso ya se ve mucho en las películas, tiros en la cabeza, en el pecho, locos que se cuelgan de lianas al cuello, montones de pastillas en el sistema mezcladas con alcohol, eso se ve mucho, incluso las bromas de la muerte con galletas remojadas en leche para cortarse las venas, aquí veremos un suicidio, lento doloroso, no de esos que se quieren matar para contar: Soy suicida!


Aquí mataremos nuestras ilusiones, nos creeremos inútiles, vacíos, seres vacuos en una sociedad sólida, ya muertas las ilusiones, con el cuerpo solo como cascaron monótono que avanza a hacer lo que demás mandan, ya cuando se haya logrado eso, se deambulara por el mundo, solo n rato, para hacer la vida miserable mirando a los demás, envidiando su felicidad, haciendo nuestra muerte, lenta y dolorosa, aquí, depende del aprecio a su cascaron que suelen llaman cuerpo para saber cuando morirán, hay unos que lo harán de viejos, otros provocaran un accidente de jóvenes, otros mas en la edad adulta, así, sencillamente cada uno escogerá su muerte, un verdadero suicidio, no aquellos que se matan para gritar: Soy suicida!

Yo no lo se de cierto, pero supongo...

Yo no lo sé de cierto, pero supongo
que una mujer y un hombre
un día se quieren,
se van quedando solos poco a poco,
algo en su corazón les dice que están solos,
solos sobre la tierra se penetran,
se van matando el uno al otro.

Todo se hace en silencio. Como
se hace la luz dentro del ojo.
El amor une cuerpos.
En silencio se van llenando el uno al otro.
Cualquier día despiertan, sobre brazos;
piensan entonces que lo saben todo.
Se ven desnudos y lo saben todo.
(Yo no lo sé de cierto. Lo supongo.)

Jaime Sabines.

Tu tienes lo que busco, lo que deseo, lo que amo...

Tú tienes lo que busco, lo que deseo, lo que amo,
tú lo tienes.
El puño de mi corazón está golpeando, llamando.
Te agradezco a los cuentos,
doy gracias a tu madre y a tu padre,
y a la muerte que no te ha visto.
Te agradezco al aire.
Eres esbelta como el trigo,
frágil como la línea de tu cuerpo.
Nunca he amado a una mujer delgada
pero tú has enamorado mis manos,
ataste mi deseo,
cogiste mis ojos como dos peces.
Por eso estoy a tu puerta, esperando.

Jaime Sabines.

Tu Nombre...

Trato de escribir en la oscuridad tu nombre.
Trato de escribir que te amo.
Trato de decir a oscuras todo esto.
No quiero que nadie se entere,
que nadie me mire a las tres de la mañana
paseando de un lado a otro de la estancia,
loco, lleno de ti, enamorado.
Iluminado, ciego, lleno de ti, derramándote.
Digo tu nombre con todo el silencio de la noche,
lo grita mi corazón amordazado.
Repito tu nombre, vuelvo a decirlo,
lo digo incansablemente,
y estoy seguro que habrá de amanecer.

Jaime Sabines.

PEQUEÑA DEL AMOR, TÚ NO LO SABES...

Pequeña del amor, tú no lo sabes,
tú no puedes saberlo todavía,
no me conmueve tu voz
ni el ángel de tu boca fría,
ni tus reacciones de sándalo
en que perfumas y expiras,
ni tu mirada de virgen
crucificada y ardida.

No me conmueve tu angustia
tan bien dicha,
ni tu sollozar callado
y sin salida.

No me conmueven tus gestos
de melancolía,
ni tu anhelar, ni tu espera,
ni la herida
de que me hablas afligida.

Me conmueves toda tú
representando tu vida
con esa pasión tan torpe
y tan limpia,
como el que quiere matarse
para contar: soy suicida.

Hoja que apenas se mueve
ya se siente desprendida:
voy a seguirte queriendo
todo el día.

Jaime Sabines.

No es Nada de tu cuerpo

No es nada de tu cuerpo
ni tu piel, ni tus ojos, ni tu vientre,
ni ese lugar secreto que los dos conocemos,
fosa de nuestra muerte, final de nuestro entierro.
No es tu boca -tu boca
que es igual que tu sexo-,
ni la reunión exacta de tus pechos,
ni tu espalda dulcísima y suave,
ni tu ombligo en que bebo.
Ni son tus muslos duros como el día,
ni tus rodillas de marfil al fuego,
ni tus pies diminutos y sangrantes,
ni tu olor, ni tu pelo.
No es tu mirada -¿qué es una mirada?-
triste luz descarriada, paz sin dueño,
ni el álbum de tu oído, ni tus voces,
ni las ojeras que te deja el sueño.
Ni es tu lengua de víbora tampoco,
flecha de avispas en el aire ciego,
ni la humedad caliente de tu asfixia
que sostiene tu beso.
No es nada de tu cuerpo,
ni una brizna, ni un pétalo,
ni una gota, ni un grano, ni un momento.

Es sólo este lugar donde estuviste,
estos mis brazos tercos.

Jaime Sabines.

No es que muera de amor, muero de ti...

No es que muera de amor, muero de ti.
Muero de ti, amor, de amor de ti,
de urgencia mía de mi piel de ti,
de mi alma, de ti y de mi boca
y del insoportable que yo soy sin ti.

Muero de ti y de mi, muero de ambos,
de nosotros, de ese,
desgarrado, partido,
me muero, te muero, lo morimos.

Morimos en mi cuarto en que estoy solo,
en mi cama en que faltas,
en la calle donde mi brazo va vacío,
en el cine y los parques, los tranvías,
los lugares donde mi hombro
acostumbra tu cabeza
y mi mano tu mano
y todo yo te sé como yo mismo.

Morimos en el sitio que le he prestado al aire
para que estés fuera de mí,
y en el lugar en que el aire se acaba
cuando te echo mi piel encima
y nos conocemos en nosotros,
separados del mundo, dichosa, penetrada,
y cierto , interminable.

Morimos, lo sabemos, lo ignoran, nos morimos
entre los dos, ahora, separados,
del uno al otro, diariamente,
cayéndonos en múltiples estatuas,
en gestos que no vemos,
en nuestras manos que nos necesitan.

Nos morimos, amor, muero en tu vientre
que no muerdo ni beso,
en tus muslos dulcísimos y vivos,
en tu carne sin fin, muero de máscaras,
de triángulos oscuros e incesantes.
Muero de mi cuerpo y de tu cuerpo,
de nuestra muerte ,amor, muero, morimos.
En el pozo de amor a todas horas,
inconsolable, a gritos,
dentro de mi, quiero decir, te llamo,
te llaman los que nacen, los que vienen
de atrás, de ti, los que a ti llegan.
Nos morimos, amor, y nada hacemos
sino morirnos más, hora tras hora,
y escribirnos y hablarnos y morirnos.

Jaime Sabines.

Me dueles

Mansamente, insoportablemente, me dueles.
Toma mi cabeza. Córtame el cuello.
Nada queda de mí después de este amor.

Entre los escombros de mi alma, búscame,
escúchame.
En algún sitio, mi voz sobreviviente, llama,
pide tu asombro, tu iluminado silencio.

Atravesando muros, atmósferas, edades,
tu rostro (tu rostro que parece que fuera cierto)
viene desde la muerte, desde antes
del primer día que despertara al mundo.

¡Qué claridad de rostro, qué ternura
de luz ensimismada,
qué dibujo de miel sobre hojas de agua!

Amo tus ojos, amo, amo tus ojos.
Soy como el hijo de tus ojos,
como una gota de tus ojos soy.
Levántame. De entre tus pies levántame, recógeme,
del suelo, de la sombra que pisas,
del rincón de tu cuarto que nunca ves en sueños.
Levántame. Porque he caído de tus manos
y quiero vivir, vivir, vivir.


Jaime Sabines

Los Amorosos

Los amorosos callan.
El amor es el silencio más fino,
el más tembloroso, el más insoportable.
Los amorosos buscan,
los amorosos son los que abandonan,
son los que cambian, los que olvidan.

Su corazón les dice que nunca han de encontrar,
no encuentran, buscan.
Los amorosos andan como locos
porque están solos, solos, solos,
entregándose, dándose a cada rato,
llorando porque no salvan al amor.

Les preocupa el amor. Los amorosos
viven al día, no pueden hacer más, no saben.
Siempre se están yendo,
siempre, hacia alguna parte.
Esperan,
no esperan nada, pero esperan.

Saben que nunca han de encontrar.
El amor es la prórroga perpetua,
siempre el paso siguiente, el otro, el otro.
Los amorosos son los insaciables,
los que siempre -¡que bueno!- han de estar solos.
Los amorosos son la hidra del cuento.

Tienen serpientes en lugar de brazos.
Las venas del cuello se les hinchan
también como serpientes para asfixiarlos.
Los amorosos no pueden dormir
porque si se duermen se los comen los gusanos.
En la oscuridad abren los ojos
y les cae en ellos el espanto.
Encuentran alacranes bajo la sábana
y su cama flota como sobre un lago.

Los amorosos son locos, sólo locos,
sin Dios y sin diablo.
Los amorosos salen de sus cuevas
temblorosos, hambrientos,
a cazar fantasmas.
Se ríen de las gentes que lo saben todo,
de las que aman a perpetuidad, verídicamente,
de las que creen en el amor
como una lámpara de inagotable aceite.

Los amorosos juegan a coger el agua,
a tatuar el humo, a no irse.
Juegan el largo, el triste juego del amor.
Nadie ha de resignarse.
Dicen que nadie ha de resignarse.
Los amorosos se avergüenzan de toda conformación.
Vacíos, pero vacíos de una a otra costilla,
la muerte les fermenta detrás de los ojos,
y ellos caminan, lloran hasta la madrugada
en que trenes y gallos se despiden dolorosamente.

Les llega a veces un olor a tierra recién nacida,
a mujeres que duermen con la mano en el sexo,
complacidas,
a arroyos de agua tierna y a cocinas.
Los amorosos se ponen a cantar entre labios
una canción no aprendida,
y se van llorando, llorando,
la hermosa vida.

Jaime sabines.

Amor mio, mi amor, amor hallado...

Amor mío, mi amor, amor hallado
de pronto en la ostra de la muerte.
Quiero comer contigo, estar, amar contigo,
quiero tocarte, verte.

Me lo digo, lo dicen en mi cuerpo
los hilos de mi sangre acostumbrada,
lo dice este dolor y mis zapatos
y mi boca y mi almohada.

Te quiero, amor, amor absurdamente,
tontamente, perdido, iluminado,
soñando rosas e inventando estrellas
y diciéndote adiós yendo a tu lado.

Te quiero desde el poste de la esquina,
desde la alfombra de ese cuarto a solas,
en las sábanas tibias de tu cuerpo
donde se duerme un agua de amapolas.

Cabellera del aire desvelado,
río de noche, platanar oscuro,
colmena ciega, amor desenterrado,

voy a seguir tus pasos hacia arriba,
de tus pies a tu muslo y tu costado.

Jaime Sabines.

sábado, 22 de noviembre de 2008

Manual para una conversacion interesante

Busque una victima, si, como victima puede ser el perro, pero buscamos una conversación interesante, no un monologo con uno mismo con la cara del canino como mudo reflejo de nuestra inútil naturaleza, no, busquemos a una persona de preferencia, por el medio que creamos conveniente, pero que no sea solo una grabación monótona de algo que nos gusta oír, busquemos a alguien que hable de preferencia conózcanlo de antemano.

Bien, ya que tienen a esa victima inicien una conversación tribal, el tema favorito para estas suele ser el clima, así que pregunten por la banalidad mas interesante que se les ocurra, claro, esto no será del todo una conversación satisfactoria, pero hará de base para el verdadero meollo del asunto, si aquella persona con la que hablan no parece estar interesada en sacar algún tema que valga la pena mencionar, hagan una pregunta, como las siguientes:

Que buscas?
Que ves al ver X cosa?
Que no se me escape mi favorita “ quien soy yo para ti?”

Claro, estas preguntas no son fáciles de responder, incluso tendrán suerte si esta conversación realmente interesante da luz, así, sencillamente, dejen que la pregunta fluya en su verdadera respuesta, esta conversación llevara varias horas y les meterá en una intimidad casi incomoda para ambos, cierren la conversación con alguna palabra bonita, un nos vemos suele bastar, así no se despiden de su interlocutor

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Patibulo V

Bien, hoy es un aniversario mas en mi vida, curiosamente antes de hoy, veía hacia atrás, CREI no haber hecho nada en una veintena de otoños, puede que eso sea lamentablemente cierto, porque aun no encuentro nada relevante para la vida de los demás, pero sin embargo, hace un par de días, en otro… campamento retiro, decidí no caer de nuevo en aquel camino que e empezado mas de una vez, ahora, por alguna razón, siento que podré comerme el mundo de una mordida, no he hecho nada relevante… hasta ahora

domingo, 9 de noviembre de 2008

El llamado

Ven el te llama
la guerra a comenzado
muy pronto el egoísmo
caerá ante el amor
Ven el te a elegido
a andar por su camino
negándote a ti mismo
y cargando tu cruz.

Ya no serás
solo uno mas
ahora serás,
un soldados de la paz
de mi señor
de su amor
y su perdón
anunciador de su reino
sal y luz de este mundo
profeta sacerdote y Rey.

Ven no tengas miedo
la lucha es difícil
pero su fuerza no nos dejara
ven el sigue esperando
la decisión es tuya
no seas indiferente
y atrévete a amar.


Ya no serás
solo uno mas
ahora serás,
un soldados de la paz
de mi señor
de su amor
y su perdón
anunciador de su reino
sal y luz de este mundo
profeta sacerdote y Rey.


Andres Gastelum.

jueves, 6 de noviembre de 2008

Manual para el escritor novato

Bien, para los que saben leer esto será un pequeño manual para el escritor principiante, ahora, les daré una pequeña lista de cuatro artículos indispensables para escribir.

1.- Papel, este puede variar, cualquier tipo de papel suele servir, desde el sanitario, hasta el klennex, pasando por las servilletas, aunque claro, también venden uno especial para esto, llamado hoja de papel.

2.- Lápiz, este puede ser suplido por la pluma, pero claro, esta no escribe en todas las superficies y puede dañar nuestro papel de mala calidad, por lo cual recomiendo el lápiz.

3.- Una idea, Esto es lo mas difícil de conseguir, pero suele ser de dos formas, un pensamiento romántico para aquellos enamorados, o alguna maldición al mundo por los desdichados.

4.- Silla, o mejor conocido como lugar para sentarse, es donde depositaran su trasero para escribir, ya que pocos suelen poder hacerlo parados.

* Nota; si ya conocen la era de la modernidad y tienen un PC a la mano, pueden sustituir el lápiz y papel por el monitor y el teclado, mas aun así, siguen siendo indispensables los otros dos artículos.

Bien, vayamos ya al meollo de nuestro tema, tomen el papel y el lápiz, vayan a sentarse en soledad o en un lugar concurrido, vean alrededor y escojan una víctima, después, en el papel, escriban un adjetivo algo así como, “bonita”, cuando ya tenga eso, vea a la persona víctima del adjetivo y pónganlo antes del adjetivo “la mujer que camina es bonita” y listo, con las conjunciones Y o E pueden hilar palabras y llenar el papel.

Ahora vayamos con los desencantados, ustedes se sentaran donde se sientan más desdichados, posaran su pesado trasero en la silla y miraran al mundo, después de maldecirlo más de una vez, recordaran todas las maldiciones y sufrimientos, estos los pondrán en el papel que llevan en el bolsillo ayudados del lápiz.

¿Acaso no es sencillo escribir?

Patibulo IV

Un minuto desperdiciado, aun me quedan 1439 para tirar en esto que me encanta, es escribir mis memorias, historias, cuentos y porque no una que otra poesia, e pensado que ya tengo material para un pequeño libro de cuentos, uno que se pueda tener en el bolsillo para leer cuando estes aburrido o necesites consuelo, pero claro, los editores no imprimiran si no garantisas un exito, por eso sigo aqui...

Saben, esto es divertido, no tener nada que deci y aun decirlo, perturbar los oidos con ruido que no vale la pena o a los ojos con letras vacuas que no merecen ser repasadas, algunos dijeron que ese es el peor de lso errores de los hombres "El Hombre puede volar como las aves, nadar como los peces y andar como los monos, solo le falta no hablar para ser perfecto." Seria divertido conocer al que dijo eso, la verdad no recuerdo quien fue, pero tiene razon en lo que dice, aunque esto no valga la pena ser escuchado, en este caso leido.

Hoy vi caminar a la gente, es uno de mis nuevos hobbies, verlos andar con la mirada baja, con prisa por llegar a ningun lado, Hobres mirando al suelo, los escaparates, o tal ves la mancha en el zapato, las mujeres no dan un mejor aspecto, incluso se me hacen divertidas las que andan con la mirada alta esperando ver quien las mira y cuando se encuentran con un par de ojos que no busca su cuerpo si no leer sus ojos, rapidas esquivan la mirada, como lo hacen los morbosos cuando ellas captan la mirada que repasa su cuerpo.

Hoy, como muchas veces antes, los hombres me han desepcionado, pareciera que olvidan quienes son, sobre todo los hijos del bronce, un muerto, claro alguien importante para el estado, este muerto detiene al pais por unos minutos, como si llorarle nos hiciera mejores, somos mexicanos, nacimos en el hombligo de la luna, somos la raza de bronce (esto es un estado patriotico fijo).

Claro, vestimos como lo hacen los gringos, actuamos como lo hacen los extranjeros, somos un pueblo decallente, que su unico logro legal ha sido ampliar el mayor monopolio y la peor industria que poseemos, Y estamos orgullosos de ello! dios, se me hacen mas divertidos los atletas, sus logros son los nuestros, como si los hubieramos apoyado en sus entrenamientos, claro pagamos impuestos diran unos, impuestos que se traga el gobierno y no dan un peso a los atletas ( que me desmientan si me equivoco), lloramos si la velocista gana, cuando nuestro mayor triunfo como personas es robar el cabloe del vacino sin que se de cuenta, o hackear el internet para obtenerlo gratis, segimos al pendiente las elecciones de E.U. cuando nuestro pueblo tiene el gobierno mediocre que se merece y no hacemos nada...

Somos una materia prima defectuosa, que no hace nada, de brazos cruzados, desnudos y sin comer, que cree que vive en el pariso.

martes, 4 de noviembre de 2008

Ver

Una tarde soleada...

Como me gustaría ver las nubes en el horizonte...

Deseo ver pequeños sueños precipitarse sobre el pavimento...

Que caigan como lluvia sobre un charco...


Ver a los desafortunados con las manos extendidas,

Tratando de atrapar un solo sueño antes de que muera contra el suelo...


Ver a los sedientos con la boca abierta hacia el cielo,

Intentando saciar su sed de fortuna...


Ver a los ancianos salir de sus casas,

Jugando como niños bajo la lluvia...


Ver a los ricos tomar el paraguas,

evitando ser tocados por esa lluvia que mancha...


ver a los niños detener su guerra imaginaria,

para tomarse de las manos y rezar por no volver a empezarla...


ver al vagabundo tirar su casa,

para que los sueños entren sin mediar palabra...


ver al soldado llorar ante la lluvia,

doblegado ante sus sueños de paz...


Ver al indígena con las manos extendidas hacia el cielo,

esperando no tener que alimentar mil bocas...


ver a los jóvenes salir de sus cavernas,

para que vislumbren los sueños que han derrochado...


ver a los políticos desde sus ventanas,

que ven al pueblo alimentar sus esperanzas...


ver un pueblo unido,

que cante bajo la lluvia...


como desearía ver todo esto...

y más, ver a cada hombre, mujer y niño,

salir de sus refugios y mojarse con los sueños de su prójimo...

verlos reír ante las desgracia con los demás...

y llorar de la alegría conjunta...


desearía ver...

al odio, amar...

a la tristeza, reír...

a la desilusión, soñar...

al olvido, pensar...

a la estupidez, callar...

a la ignorancia, aprender...

a la intolerancia, jugar...


desearía ver un último ocaso antes de morir...

y que en ese infinito atardecer,

queden gravadas mis palabras...

para que se conviertan en una gota más...

una gota que caiga con la lluvia de sueños...

y moje al desafortunado, al sediento...

a los ancianos y a los ricos...

a los niños y al vagabundo...

al soldado y al indígena...

a los jóvenes y a los políticos...

para bañarlos en la esperanza de un mundo mejor...

Patibulo III

Hoy Tengo ganas de jugar al dictador, al gobernante misógino y déspota, jugar a simplemente controlar mi vida sin opiniones extras, tal como lo haría un dictador ignorando al senado, espero que mi vida no sea una democracia, porque de serlo, creo que todos estaríamos en un gran problema de identidad, aquí no se aplica el ¨que te parece si haces esto¨, no, aquí es una dictadura, un gobernador misógino y déspota que hace lo que quiere, lo que quiere con su propia vida.

Derrocharla? Improbable, es imposible derrocar la vida, siempre se aprovecha, siempre se aprende, Déspota? Si eso puede que lo haga más, gobernar sin ley alguna, disfrutar del placer más refinado o el más vulgar, pero disfrutarlos sin ley sin tapujos, claro, dentro de los límites permitidos para la buena convivencia, solo sin tabús, Misógino? Jajajaja esto sería divertido, no creo que nadie odie a las mujeres si piensa disfrutar de los placeres de la vida y que tal dictador? Me parece perfecto, no oigamos a las voces de los demás, tomemos, perdón por la expresión, a la vida por los huevos por nuestra propia convicción, veamos lo que en verdad deseamos, traguémonos el mundo de una sola mordida, claro, es mucha agua para poderlo tragar por completo.

lunes, 3 de noviembre de 2008

Currente Calamo

Al correr de la pluma… no se bien quien dijo eso, pero prácticamente hoy se aplica, no e dejado esto, ya son mas de trece horas las que paso escribiendo letra tras letra, tipografiando, mis dedos puede que terminen planos, se que son pocas las personas que leen esto, ya suman tres las que saben de este, mi pequeño paraíso olvidado, vamos, no me digan que no se dieron cuenta, antes de hoy, o de este fin de semana en particular, ya que en noviembre esta seria la octava entrada, y en lo que va del ano, antes del 1 de Nov. Eran 7, las que suman el anyo pasado suman también siete, catorce en total hasta hoy, no creo juntar 14 entradas en un día, pero por separado, ya las pase, una a una… por un simple, currente calamo.

Robo (5)

Dios, mas codigos, el mensaje es claro, la narracion cambia, creo que el hombre al que hurte el libro tambien vendra por mi si no es que lo hace primero ella, ahora camino con miedo, tras cada esquina se puede encontrar algo, mas de noche, ya no salgo de noche, me encierro en mi cuarto, creo que me estoy volviendo paranoico, "sophie, te busco, aun ahora te busco" es lo que va de esto, no se muy bien donde lo publicaria, pero las hojas tienen manchas de sangre en algunos sitios, no todas, pero tienen pequenas gotas carmesi, saben donde estoy, me pregunto por que no han venido.

"Despertó estirando los brazos, aquello era un torreón de algún castillo abandonado, sonrío mirando su nuevo hogar, no recuerda cuantas veces a cambiado de locacion, pero siempre termina huyendo por culpa de los aldeanos enfurecidos, aquel sitio es nuevo, ni siquiera sabe el nombre de la aldea que esta ahí a metros de lo que parece ser le viejo casco de la ciudad perdida en el desierto, todos parecen vivir dentro de los muros de la ciudad, ya han pasado mas de un siglo de su muerte, o mas bien de su nueva vida, se levanto del lecho, aun estaba vacío aquel sitio, el suelo de piedra la daba abrigo, esperaba poder robar una manta hoy, algo mullido para recostarse.


Así salio de aquellas ruinas, no dudo en dar un salto que le llevaría a las almenas y de ahí al suelo del interior de la ciudad, caminaba mirando al as personas, auque las calles parecían desiertas a su paso, no les presto mucha atención a estas, buscaba una taberna, donde seguramente estarían metidos maleantes y borrachos.


Algunas cadenas se arrastraban por las empedradas calles de la prospera ciudad de comerciantes, el sonido lo hacían mis ropas, metal, piel y tela es lo que cubre mi cuerpo, sonrío al notar un olor, un olor tan familiar que a la vez me confunde, sonríe para mi, la creía muerta, era una neonata, la única de su prole y la ultima que había abrazado, la recuerdo bella, auque supongo que su nueva sangre y el tiempo le han refinado los rasgos a de estar mas… como decirlo, seductora, bella… deseable. Así, sin más preámbulo corte con los dientes mi piel, dejando caer una única gota de sangre al suelo.


Un golpe de olor golpeo a la mujer, como si de una honda expansiva se tratase, un olor solo perceptible para pocos, y en aquel sitio, solo para ella, le golpeo el rostro como una bofetada, su mente vago, un siglo atrás, donde comenzó todo, como si por arte de algún embrujo recordara la noche donde desnuda, perlada en el agua del lago, alguien la desangrara, frunció la nariz, no era posible, no era posible encontrarle a el, por un momento, sintió un odio profundo, su piel se erizo, sus manos crearon las garras alargando las unas, si, ese olor era inconfundible para ella, camino por las calles, mas cautelosa que nunca, revisando cada callejón con la vista, yendo al centro de aquel olor, deseaba encantarlo, odiaba aquella sangre como los humanos le odian a ella, tenia que encontrarlo, y lo hizo, le vio, a lo lejos, sus manos tomaron un par de dagas en cada una, sus ojos se inyectaron de sangre antes de correr, de abalanzarse sobre el hombre que estaba ahí parado, de pie ante la gota de su olor.


Sonreí al verla llegar, si era ella y mas bella que como la recordaba, su cuerpo avanzaba celere contra mi, no me movía, no es tiempo, lleva ropas extravagantes, lo cual me hizo reír suavemente, si, era mi vástago, la neonata desaparecida, la que tenia el coraje para sobrevivir por si misma, apenas y sus armas se levantaron contra mi, me aparte, dando un golpe certero a su abdomen que hizo que se doblara del dolor, me aparte, no deseaba lastimarla, pero me recordaba tanto a mi, yo también trate de matar a mi sire la primera vez que lo vi y me perdono la vida.

- Bella, muy bella.-


La chica sintió el golpe, se doblo ante el rudo trato, al escuchar aquellas palabras se irguió de nuevo, mirando desafiante al hombre, recordaba aquellas palabras, las primeras que escucho de sus labios hace 100 anos y ahora, después de tanto tiempo, son las mismas, pareciera condenada a escucharlas cada vez que le ve.

-No te cansas de repetirlo?-

Jadea un poco al hablar, causa del dolor que sentía, pero que no le importaba, volvió al ataque, tratando de desgarrar con certeza dos puntos, la yugular y la vena femoral, auque sus armas apenas rozaron la tela, el era mas rápido y a distancia segura, se movía evitándola.


Reí al escucharla, sus golpes rasgaron mi ropa, no le di importancia, al cinto solo traía un látigo, aunque mas bien pareciera para cazar licántropos, fragmentado y hecho de palta con una punta de lanza por final.

-Contigo nunca.- Dije sarcástico, irónico.

-Maldito, ven acá.- Dicho aquello, más tajos, más evasiones.

-No lo haré, estas en mis tierras, tendrás que irte tú.-

- Te matare.- Cada palabra suya va acompañada de amenazas que tratan de lograr su cometido, como si de una promesa se tratase.

- Vamos no puede ser lo único que tienes.- Esta ves fue el que con un movimiento que ella apenas pudo ver, clavo la punta de la lanza que era el látigo en su pierna, comenzaban a flaquear las fuerzas de la chica.

- Bastardo.- Mas maldiciones, aquello comenzaba a aburrir al hombre, no le presto atención, tiro de la cadena que forma el látigo lanzándola al suelo.

- Bien, si me permites, te invitare una copa.-

- Por que no me matas?-

- De haberlo querido, lo habría hecho hace ya bastante tiempo.- El látigo se volvió a enrollar en las manos de su dueño, saliendo con un gemido de dolor de las carnes femeninas.

- De acuerdo.- Dice victima del cansancio, auque ya la ira parece haberse esfumado, la curiosidad le gana un poco.


Le tendí una mano, que ella desprecio, levantándose por su propio pie, sonreí, una sonrisa mas mía que para ella, con la cabeza le indique la dirección, no muy lejos, un cartel de madera rezaba “VITAE”, me detuve frente al sitio, abriendo la puerta para dejarle pasar, ella quieta tras de mi no entro, así que entrando primero, deje la puerta abierta para que me siguiera. "


Dios, pareciera que no quiero saber que mas dice el codigo que va a cada orilla de las hojas, mejor se los dejo a ustedes, yo solo transcribire esto, por si a algun curioso se le ocurre, estos codigos de lo que creo el escribio, no se a donde van, pero no me dejarian nada bueno, bueno, hasta ahora solo me han presentado a mi parte paranoica.

R3. 1,2 15,13 24,5 26,1 2,16 61,3 41,13 1,2 17,1 2,2 52,27 31,15 6,6 22,3 32,19

I Need

Hoy tengo la necesidad patologica de escribir...

Kiara II

La luz comienza a filtrarse por entre los tablones del establo, se oía el ruido del resto de los animales con los que compartía el techo, los ovinos, equinos patalean y bufan, pronto llegarían a ordenar a las vacas y cabras, pera sacar a pastar a los animales y las mulas al campo a trabajar, el caballo del señor de la casa seria cepillado y acicalado, pocas veces había estado el día completo en este sitio, ya que tan pronto como ordenan a las vacas me sacan de la jaula para llevarme adentro a cumplir con mis funciones.

La puerta del establo se abrió con el rechinar de las bisagras al empujarla pesada puerta, mire perezosa al sitio, se abría dejando entrar toda la luz de la mañana, así me arrodille para estirar un poco mas mi cuerpo entumido por la noche agarrotada que paso, mi espalda sintió los barrotes que cubrían el techo de mi jaula, sonreí al ver al hombre con dos cubos de madera entrar, este iba directo a donde estaba yo, ya habrían pasado tres anos desde que lo veo entrar todas las mañanas, había pasado toda mi vida en aquel sitio, cuando el me propuso escapar rehúse, no conocía otro mundo, así, se acerco a al jaula, abriéndola primero, así mis pies podrían hacerse hacia atrás pera poder salir, pero el tiron de la cadena que me mantenía la muro detuvo mi avance, el chico soltó una risa, era un chico entre los humanos, apenas alcanzaría la primera veintena.
-Calma Kiara, cual es la prisa.-
A mi aquello no se me hacia divertido, pero ronronee moviendo mi cuerpo para que se apurara, mi cuerpo no se mantenía del todo desnudo, me habían dado una especie de chaleco de piel que no alcanzaba a cubrir la totalidad de mis senos y una especie de faldita también de piel marrón, con el agujero justo para que saliera mi cola, mi cuerpo estaba cubierto por un pelaje dorado, que decían combinaba con la piel marrón que portaba, según me dijo el chico una vez, mi rostro se parecía al de un mapache por tener un antifaz negro, nunca me había visto mi rostro, así que supongo que lleva la razón.

Cuando por fin me saco de la jaula, el no usaba las cadenas para mantener mis articulaciones fijas, confiaba en mi, me dio un cubo, yo le sonreía, me agradaba estar con el, le llamaban Abel, era un hombre joven, su cuerpo se veía fibroso bajo la tela, su cabello negro y su tez blanca, tenia un rostro amable coronado por dos ojos marrones, era un buen espécimen, joven y sonador, pero cuando me descubrió embotada mirándole chasqueo los dedos, por lo cual tome mi cubo y fui a llenarlo con leche de cabra, era un problema, pero Abel me dejaba beber de la cubeta si deseaba, el termino rápido con las vacas, lleno un cubo, solo tenia que ordenar a una tenia suerte, yo tenia cuatro cabras para llenar el cubo, además, son las únicas con las que puedo hacerlo, no se pueden ordenar todas por ves. Termine con las cabras, ahora venia la parte que no me gustaba mucho, no me podía acostumbrar a tener las manos atadas, Abel sostenía dos cadenas me miraba con una cara de resignación, yo baje la mirada, extendiendo ambas manos.
- Se que no te gusta, pero sabes que son las reglas.-
Asentí suavemente, El trababa el final de la cadena en las argollas de las manos, y el otro extremo en el pie del mismo costado, no eran largas, no me permitían estar erguida, eran del tamaño justo para andar a gatas, Abel sostenía la cadena que colgaba de mi cuello, guiándome, a la fuerza, ya que aun me resistía a avanzar a la cabaña principal.

Entramos por la cocina, Abel le dejo a otra Humana los baldes con leche, y me seguía guiando a la fuerza a la siguiente habitación, me negaba, incluso aullaba quedamente para que Kael no oyera, pero termine cediendo, como siempre, odiaba la mañana y mas la noche, cuando al fin estuve en el llamado comedor, soltaron las cadenas, pero no mucho, ya que me volvieron a atar, a un caballete que me mantendría así, arrodillada, y fija al suelo, con las piernas ligeramente separadas, cuando Abel había terminado apenas con el ultimo cerrojo se oyó una potente voz cruzar la habitación, cosa que me erizo los cabellos como lo había siendo desde hace un par de meses.
-Como esta mi chica, lista para el desayuno?-
Claro que no me hablaba a mí, fue Abel el que respondía.
-Lista señor, ahora si me permite.-
-Claro chico, márchate y cierra la puerta.-